En el marco de Arteba 2024, la feria que cada año se convierte en un punto de convergencia para diversas expresiones artísticas, se presentó el Club Arteba, un espacio innovador destinado a fomentar la comunidad artística a lo largo del año. Esta nueva propuesta se destaca por promover el intercambio y el crecimiento, no solo durante la feria, sino también en actividades continuas.

La coordinación integral de este espacio estuvo a cargo del Arq. Facundo Cruz y de su colega Julia Derluk, bajo la convocatoria del reconocido Arq. Horacio Torcello, quien había liderado el diseño general de ediciones anteriores de la feria. El enfoque fue claro: crear un ambiente que reflejara el espíritu de encuentro y convocatoria que Violeta Quesada, representante de la fundación, transmitió desde el principio.

El punto de partida para el diseño fue la paleta gráfica, centrada en tonos azules y violetas, que estableció el tono para la selección de mobiliario. Optaron por piezas modulares y versátiles de Grupo (A)², que se adaptaran a la flexibilidad y a la propuesta estética del espacio. Las curvas de los sistemas modulares «Bend», junto con los sillones «Domino» y PufFs, aportaron una sensación de organicidad y multiplicidad, unificadas por una gama de grises y azules en diferentes intensidades. Este ambiente fue complementado con una carpeta que refuerza la cohesión visual, y arreglos botánicos de formas irregulares que acentuaron la asimetría del diseño.

Para la zona de reuniones, se eligió una mesa con tapa simil cemento pulido, aportando solidez al conjunto. Las sillas «Fold» plegables en dos tonos añadieron un toque de informalidad que desestructuró el espacio, manteniendo su funcionalidad.

La iluminación fue otro elemento clave en el diseño. En el área de estar, se dispusieron tubos de luz en dirección diagonal, sugiriendo un dinamismo que traspasa los límites físicos del espacio. Por otro lado, en la zona de reuniones, un conjunto de luminarias suspendidas aportó calidez e intimidad, creando un ambiente acogedor y enfocado. Ambos elementos lumínicos fueron seleccionados por su capacidad de resaltar el espacio sin restarle protagonismo a la luz misma.

El resultado fue un espacio donde el diseño y la funcionalidad se entrelazan, creando un entorno que no solo cumplió con las expectativas, sino que superó las mismas, convirtiéndose en un referente de cómo el diseño puede enriquecer la experiencia artística y comunitaria en eventos de gran envergadura.