¿Cómo nos podemos mantener conectado con nuestro equipo de trabajo?
¿Cómo se crea y apoya una cultura remota?
¿Cómo podemos mantener el trabajo avanzando?
Si bien trabajar juntos cuando no lo estamos, y comprender que el ritmo de trabajo de forma remota no es una melodía de 9-5, tanto trabajando en la misma zona horaria como no, entendemos que pueden llevarse a cabo algunas practicas que nos van a permiten ayudarnos a gestionar esta nueva realidad.
1. Use las herramientas correctas basadas en lo que necesita.
Las herramientas disponibles para los equipos distribuidos hoy son buenas, pero no perfectas para todo lo que hacemos. Por lo tanto, podemos utilizar diferentes aplicaciones para distintos objetivos. Algunas aplicaciones que te pueden ser de gran ayuda son Zoom , O365 , WhatsApp , Teams, Skype y/o Mural . Si bien ninguna plataforma es perfecta, esta última es ideal para crear algo en conjunto utilizando notas adhesivas digitales de alta calidad visual. Aunque cabe señalar que no es la herramienta más viable para conectarse de casa.
En Grupo(a)² hemos adoptado por Zoom y Google Meet que funcionan muy bien pese a que a veces se tiene que elegir entre ver a las personas o el contenido que se comparte.
2. Presta atención real a tus compañeros que están hablando por teléfono o en video.
El concepto de «disparidad de presencia» significa que las personas remotas pueden estar en desventaja en comparación con las personas que están en una sala de reunión. Por ejemplo, las personas en la misma habitación tienen más probabilidades de hablar entre sí y olvidarse de la persona en la pantalla de video o la persona que está al teléfono o en altavoz. Del mismo modo, es más fácil ingresar a la conversación usando la herramienta de video por sobre la de audio, solo porque la presencia visual hace que sea más fácil llamar la atención de las personas. Por ello, debemos recordar ser más inclusivos y darles a todos la oportunidad de contribuir a la conversación. Es importante hablar claro y pausadamente, además de pedir a los participantes más callados que intervengan. Eso ayuda a igualar la «presencia», el hacer que todos sean parte de la videoconferencia o conferencia telefónica.
3. Programar reuniones informales ayudar a los miembros del equipo a conectarse y manejar mejor la aplicación.
Los encuentros informales con compañeros de trabajo todavía están limitados no solo por nuestra situación actual sino también por el uso óptimo de las aplicaciones mencionadas. De esta manera, una forma de lograr un mejor uso de la herramienta seleccionada es programar reuniones informales semanales (o la cantidad necesaria que decida el jefe del equipo), lo cual también ayuda a fomentar la cohesión del equipo. Compartir el trabajo en equipo así como ponerse al día con noticias personales (compromisos, nacimientos, etc.), además de que refuerzan los lazos entre colegas, generan confianza y logran que no nos deshumanicemos ante esta situación que estamos padeciendo.
4. La importancia de la rotación del uso horario
La separación del tiempo en un equipo global presenta uno de los mayores desafíos físicos, cognitivos y emocionales. En Grupo(a)² , dado que también llevamos a cabo reuniones con los equipos de trabajo de Teknion (Canadá), Actiu (España) e Interstuhl (Alemania), hemos optado por rotar nuestro calendario de reuniones. Por mes, podemos llegar a tener dos reunión remota programadas con los equipos de dichas empresas internacionales en diferentes horarios. En otras palabras, y a modo de ejemplo, podemos llegar a tener una reunión a media mañana y otra por la tarde/noche para que no se cree un desequilibrio para uno de los equipos y sea más justo y/o equitativo para todos.
Creemos que todos estos enfoques suman al aumento de la empatía de nuestro equipo de trabajo. Esta compasión alimenta la confianza, el compromiso y la colaboración, e impulsa nuestro negocio hacia adelante.